Una línea de código, un millón de dólares
Si le preguntara cuánto costaría cambiar una sola línea de código informático en un dispositivo que ya está en servicio, ¿qué cifra le vendría a la mente? ¿Unos cientos de dólares? ¿Tal vez miles?
Según Aviation Today, a una compañía aérea comercial le cuesta un millón de dólares actualizar una línea de código en sus aviones. Para un coste tan importante, probablemente necesitarían una razón de peso para dar los pasos necesarios para realizar cualquier actualización de los sistemas de sus aviones, lo que realmente me hizo pensar en una serie de factores.
Desglosar el coste
Aunque el artículo no explica en qué consiste el coste de un millón de dólares, creo que es una cifra viable. No soy un experto específicamente en actualizaciones de software de aerolíneas, pero puedo suponer algunos de los pasos que la aerolínea se ve obligada a dar en esta situación.
En primer lugar, la compañía aérea tiene que descubrir un fallo o una vulnerabilidad que haga necesaria la actualización. El ejemplo citado consiste en una investigación realizada por el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) en un Boeing 757. Los resultados -un hackeo remoto tras sólo dos días de trabajo- son más que convincentes para que cualquier aerolínea tome nota.
A partir de ahí, los desarrolladores de software tienen que analizar los resultados, escribir un nuevo código y probarlo en un entorno seguro para asegurarse de que el problema está solucionado. Ahora viene la parte complicada. La aerolínea tiene que dejar en tierra cada avión vulnerable o defectuoso, aplicar el nuevo código, probarlo para asegurarse de que funciona con ese avión concreto y, a continuación, volver a certificar ese plan para el vuelo comercial.
Según airfleets.net, Southwest Airlines tiene actualmente 499 aviones Boeing 737-700 en su flota. Considere la inversión de tiempo y dinero que supondría la aparición de un fallo de seguridad en este modelo de avión en particular.
No es sólo un reto para las aerolíneas
Está claro que las compañías aéreas deberían tener interés en emplear principios de codificación seguros desde el principio. Después de pensarlo un momento, pude ver numerosas industrias y situaciones en las que podría aplicarse un coste similar. En lugar de preocuparse por los aviones que caen del cielo debido a una vulnerabilidad hackeada, ¿qué pasa con los dispositivos médicos como los marcapasos? ¿Cuánto cuesta retirar y actualizar medio millón de piezas electrónicas que salvan vidas?
En la industria del automóvil, seguimos oyendo hablar y preocuparnos por la seguridad de los coches autoconducidos. Sin embargo, incluso nuestros vehículos "típicos" dependen más que nunca de la conectividad a Internet, lo que lleva directamente a algunas preocupaciones de seguridad preocupantes, aunque entretenidas.
Es un hecho simple que cuesta mucho más dinero y lleva más esfuerzo y tiempo actualizar los dispositivos o sistemas después de que se hayan lanzado en un entorno de producción, o antes de que se hayan producido en masa, que construir la seguridad en su proceso de desarrollo inicial. Sin embargo, seguimos viendo cada día nuevos fallos de software y vulnerabilidades de ciberseguridad evitables, lo que subraya la necesidad de que las empresas busquen formas de incorporar el desarrollo de software seguro a su cultura de desarrollo.
El coste de cambiar una línea de código en un equipo de aviónica es de un millón de dólares, y se tarda un año en aplicarlo. Para Southwest Airlines, cuya flota se basa en el 737 de Boeing, les llevaría a la "quiebra" si una cibervulnerabilidad fuera específica de los sistemas a bordo de los 737


El coste de cambiar una línea de código en un equipo de aviónica es de un millón de dólares, y se tarda un año en aplicarlo. Para Southwest Airlines, cuya flota se basa en Boeings 737, supondría la "quiebra"
Matias Madou, Ph.D. es experto en seguridad, investigador y CTO y cofundador de Secure Code Warrior. Matias obtuvo su doctorado en Seguridad de Aplicaciones en la Universidad de Gante, centrándose en soluciones de análisis estático. Más tarde se incorporó a Fortify en EE.UU., donde se dio cuenta de que no bastaba con detectar problemas de código sin ayudar a los desarrolladores a escribir código seguro. Esto le inspiró para desarrollar productos que ayuden a los desarrolladores, alivien la carga de la seguridad y superen las expectativas de los clientes. Cuando no está en su escritorio como parte de Team Awesome, le gusta estar en el escenario presentando en conferencias como RSA Conference, BlackHat y DefCon.

Secure Code Warrior está a disposición de su organización para ayudarle a proteger el código a lo largo de todo el ciclo de vida de desarrollo de software y crear una cultura en la que la ciberseguridad sea una prioridad. Tanto si es director de AppSec, desarrollador, CISO o cualquier persona implicada en la seguridad, podemos ayudar a su organización a reducir los riesgos asociados a un código inseguro.
Reservar una demostraciónMatias Madou, Ph.D. es experto en seguridad, investigador y CTO y cofundador de Secure Code Warrior. Matias obtuvo su doctorado en Seguridad de Aplicaciones en la Universidad de Gante, centrándose en soluciones de análisis estático. Más tarde se incorporó a Fortify en EE.UU., donde se dio cuenta de que no bastaba con detectar problemas de código sin ayudar a los desarrolladores a escribir código seguro. Esto le inspiró para desarrollar productos que ayuden a los desarrolladores, alivien la carga de la seguridad y superen las expectativas de los clientes. Cuando no está en su escritorio como parte de Team Awesome, le gusta estar en el escenario presentando en conferencias como RSA Conference, BlackHat y DefCon.
Matías es un investigador y desarrollador con más de 15 años de experiencia práctica en seguridad de software. Ha desarrollado soluciones para empresas como Fortify Software y su propia empresa Sensei Security. A lo largo de su carrera, Matías ha dirigido múltiples proyectos de investigación sobre seguridad de aplicaciones que han dado lugar a productos comerciales y cuenta con más de 10 patentes en su haber. Cuando está lejos de su escritorio, Matias ha servido como instructor para la formación de seguridad de aplicaciones avanzadas courses y regularmente habla en conferencias mundiales como la Conferencia RSA, Black Hat, DefCon, BSIMM, OWASP AppSec y BruCon.
Matías es doctor en Ingeniería Informática por la Universidad de Gante, donde estudió la seguridad de las aplicaciones mediante la ofuscación de programas para ocultar el funcionamiento interno de una aplicación.


Si le preguntara cuánto costaría cambiar una sola línea de código informático en un dispositivo que ya está en servicio, ¿qué cifra le vendría a la mente? ¿Unos cientos de dólares? ¿Tal vez miles?
Según Aviation Today, a una compañía aérea comercial le cuesta un millón de dólares actualizar una línea de código en sus aviones. Para un coste tan importante, probablemente necesitarían una razón de peso para dar los pasos necesarios para realizar cualquier actualización de los sistemas de sus aviones, lo que realmente me hizo pensar en una serie de factores.
Desglosar el coste
Aunque el artículo no explica en qué consiste el coste de un millón de dólares, creo que es una cifra viable. No soy un experto específicamente en actualizaciones de software de aerolíneas, pero puedo suponer algunos de los pasos que la aerolínea se ve obligada a dar en esta situación.
En primer lugar, la compañía aérea tiene que descubrir un fallo o una vulnerabilidad que haga necesaria la actualización. El ejemplo citado consiste en una investigación realizada por el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) en un Boeing 757. Los resultados -un hackeo remoto tras sólo dos días de trabajo- son más que convincentes para que cualquier aerolínea tome nota.
A partir de ahí, los desarrolladores de software tienen que analizar los resultados, escribir un nuevo código y probarlo en un entorno seguro para asegurarse de que el problema está solucionado. Ahora viene la parte complicada. La aerolínea tiene que dejar en tierra cada avión vulnerable o defectuoso, aplicar el nuevo código, probarlo para asegurarse de que funciona con ese avión concreto y, a continuación, volver a certificar ese plan para el vuelo comercial.
Según airfleets.net, Southwest Airlines tiene actualmente 499 aviones Boeing 737-700 en su flota. Considere la inversión de tiempo y dinero que supondría la aparición de un fallo de seguridad en este modelo de avión en particular.
No es sólo un reto para las aerolíneas
Está claro que las compañías aéreas deberían tener interés en emplear principios de codificación seguros desde el principio. Después de pensarlo un momento, pude ver numerosas industrias y situaciones en las que podría aplicarse un coste similar. En lugar de preocuparse por los aviones que caen del cielo debido a una vulnerabilidad hackeada, ¿qué pasa con los dispositivos médicos como los marcapasos? ¿Cuánto cuesta retirar y actualizar medio millón de piezas electrónicas que salvan vidas?
En la industria del automóvil, seguimos oyendo hablar y preocuparnos por la seguridad de los coches autoconducidos. Sin embargo, incluso nuestros vehículos "típicos" dependen más que nunca de la conectividad a Internet, lo que lleva directamente a algunas preocupaciones de seguridad preocupantes, aunque entretenidas.
Es un hecho simple que cuesta mucho más dinero y lleva más esfuerzo y tiempo actualizar los dispositivos o sistemas después de que se hayan lanzado en un entorno de producción, o antes de que se hayan producido en masa, que construir la seguridad en su proceso de desarrollo inicial. Sin embargo, seguimos viendo cada día nuevos fallos de software y vulnerabilidades de ciberseguridad evitables, lo que subraya la necesidad de que las empresas busquen formas de incorporar el desarrollo de software seguro a su cultura de desarrollo.
El coste de cambiar una línea de código en un equipo de aviónica es de un millón de dólares, y se tarda un año en aplicarlo. Para Southwest Airlines, cuya flota se basa en el 737 de Boeing, les llevaría a la "quiebra" si una cibervulnerabilidad fuera específica de los sistemas a bordo de los 737

Si le preguntara cuánto costaría cambiar una sola línea de código informático en un dispositivo que ya está en servicio, ¿qué cifra le vendría a la mente? ¿Unos cientos de dólares? ¿Tal vez miles?
Según Aviation Today, a una compañía aérea comercial le cuesta un millón de dólares actualizar una línea de código en sus aviones. Para un coste tan importante, probablemente necesitarían una razón de peso para dar los pasos necesarios para realizar cualquier actualización de los sistemas de sus aviones, lo que realmente me hizo pensar en una serie de factores.
Desglosar el coste
Aunque el artículo no explica en qué consiste el coste de un millón de dólares, creo que es una cifra viable. No soy un experto específicamente en actualizaciones de software de aerolíneas, pero puedo suponer algunos de los pasos que la aerolínea se ve obligada a dar en esta situación.
En primer lugar, la compañía aérea tiene que descubrir un fallo o una vulnerabilidad que haga necesaria la actualización. El ejemplo citado consiste en una investigación realizada por el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) en un Boeing 757. Los resultados -un hackeo remoto tras sólo dos días de trabajo- son más que convincentes para que cualquier aerolínea tome nota.
A partir de ahí, los desarrolladores de software tienen que analizar los resultados, escribir un nuevo código y probarlo en un entorno seguro para asegurarse de que el problema está solucionado. Ahora viene la parte complicada. La aerolínea tiene que dejar en tierra cada avión vulnerable o defectuoso, aplicar el nuevo código, probarlo para asegurarse de que funciona con ese avión concreto y, a continuación, volver a certificar ese plan para el vuelo comercial.
Según airfleets.net, Southwest Airlines tiene actualmente 499 aviones Boeing 737-700 en su flota. Considere la inversión de tiempo y dinero que supondría la aparición de un fallo de seguridad en este modelo de avión en particular.
No es sólo un reto para las aerolíneas
Está claro que las compañías aéreas deberían tener interés en emplear principios de codificación seguros desde el principio. Después de pensarlo un momento, pude ver numerosas industrias y situaciones en las que podría aplicarse un coste similar. En lugar de preocuparse por los aviones que caen del cielo debido a una vulnerabilidad hackeada, ¿qué pasa con los dispositivos médicos como los marcapasos? ¿Cuánto cuesta retirar y actualizar medio millón de piezas electrónicas que salvan vidas?
En la industria del automóvil, seguimos oyendo hablar y preocuparnos por la seguridad de los coches autoconducidos. Sin embargo, incluso nuestros vehículos "típicos" dependen más que nunca de la conectividad a Internet, lo que lleva directamente a algunas preocupaciones de seguridad preocupantes, aunque entretenidas.
Es un hecho simple que cuesta mucho más dinero y lleva más esfuerzo y tiempo actualizar los dispositivos o sistemas después de que se hayan lanzado en un entorno de producción, o antes de que se hayan producido en masa, que construir la seguridad en su proceso de desarrollo inicial. Sin embargo, seguimos viendo cada día nuevos fallos de software y vulnerabilidades de ciberseguridad evitables, lo que subraya la necesidad de que las empresas busquen formas de incorporar el desarrollo de software seguro a su cultura de desarrollo.
El coste de cambiar una línea de código en un equipo de aviónica es de un millón de dólares, y se tarda un año en aplicarlo. Para Southwest Airlines, cuya flota se basa en el 737 de Boeing, les llevaría a la "quiebra" si una cibervulnerabilidad fuera específica de los sistemas a bordo de los 737

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Secure Code Warrior está a disposición de su organización para ayudarle a proteger el código a lo largo de todo el ciclo de vida de desarrollo de software y crear una cultura en la que la ciberseguridad sea una prioridad. Tanto si es director de AppSec, desarrollador, CISO o cualquier persona implicada en la seguridad, podemos ayudar a su organización a reducir los riesgos asociados a un código inseguro.
Ver el informeReservar una demostraciónMatias Madou, Ph.D. es experto en seguridad, investigador y CTO y cofundador de Secure Code Warrior. Matias obtuvo su doctorado en Seguridad de Aplicaciones en la Universidad de Gante, centrándose en soluciones de análisis estático. Más tarde se incorporó a Fortify en EE.UU., donde se dio cuenta de que no bastaba con detectar problemas de código sin ayudar a los desarrolladores a escribir código seguro. Esto le inspiró para desarrollar productos que ayuden a los desarrolladores, alivien la carga de la seguridad y superen las expectativas de los clientes. Cuando no está en su escritorio como parte de Team Awesome, le gusta estar en el escenario presentando en conferencias como RSA Conference, BlackHat y DefCon.
Matías es un investigador y desarrollador con más de 15 años de experiencia práctica en seguridad de software. Ha desarrollado soluciones para empresas como Fortify Software y su propia empresa Sensei Security. A lo largo de su carrera, Matías ha dirigido múltiples proyectos de investigación sobre seguridad de aplicaciones que han dado lugar a productos comerciales y cuenta con más de 10 patentes en su haber. Cuando está lejos de su escritorio, Matias ha servido como instructor para la formación de seguridad de aplicaciones avanzadas courses y regularmente habla en conferencias mundiales como la Conferencia RSA, Black Hat, DefCon, BSIMM, OWASP AppSec y BruCon.
Matías es doctor en Ingeniería Informática por la Universidad de Gante, donde estudió la seguridad de las aplicaciones mediante la ofuscación de programas para ocultar el funcionamiento interno de una aplicación.
Si le preguntara cuánto costaría cambiar una sola línea de código informático en un dispositivo que ya está en servicio, ¿qué cifra le vendría a la mente? ¿Unos cientos de dólares? ¿Tal vez miles?
Según Aviation Today, a una compañía aérea comercial le cuesta un millón de dólares actualizar una línea de código en sus aviones. Para un coste tan importante, probablemente necesitarían una razón de peso para dar los pasos necesarios para realizar cualquier actualización de los sistemas de sus aviones, lo que realmente me hizo pensar en una serie de factores.
Desglosar el coste
Aunque el artículo no explica en qué consiste el coste de un millón de dólares, creo que es una cifra viable. No soy un experto específicamente en actualizaciones de software de aerolíneas, pero puedo suponer algunos de los pasos que la aerolínea se ve obligada a dar en esta situación.
En primer lugar, la compañía aérea tiene que descubrir un fallo o una vulnerabilidad que haga necesaria la actualización. El ejemplo citado consiste en una investigación realizada por el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) en un Boeing 757. Los resultados -un hackeo remoto tras sólo dos días de trabajo- son más que convincentes para que cualquier aerolínea tome nota.
A partir de ahí, los desarrolladores de software tienen que analizar los resultados, escribir un nuevo código y probarlo en un entorno seguro para asegurarse de que el problema está solucionado. Ahora viene la parte complicada. La aerolínea tiene que dejar en tierra cada avión vulnerable o defectuoso, aplicar el nuevo código, probarlo para asegurarse de que funciona con ese avión concreto y, a continuación, volver a certificar ese plan para el vuelo comercial.
Según airfleets.net, Southwest Airlines tiene actualmente 499 aviones Boeing 737-700 en su flota. Considere la inversión de tiempo y dinero que supondría la aparición de un fallo de seguridad en este modelo de avión en particular.
No es sólo un reto para las aerolíneas
Está claro que las compañías aéreas deberían tener interés en emplear principios de codificación seguros desde el principio. Después de pensarlo un momento, pude ver numerosas industrias y situaciones en las que podría aplicarse un coste similar. En lugar de preocuparse por los aviones que caen del cielo debido a una vulnerabilidad hackeada, ¿qué pasa con los dispositivos médicos como los marcapasos? ¿Cuánto cuesta retirar y actualizar medio millón de piezas electrónicas que salvan vidas?
En la industria del automóvil, seguimos oyendo hablar y preocuparnos por la seguridad de los coches autoconducidos. Sin embargo, incluso nuestros vehículos "típicos" dependen más que nunca de la conectividad a Internet, lo que lleva directamente a algunas preocupaciones de seguridad preocupantes, aunque entretenidas.
Es un hecho simple que cuesta mucho más dinero y lleva más esfuerzo y tiempo actualizar los dispositivos o sistemas después de que se hayan lanzado en un entorno de producción, o antes de que se hayan producido en masa, que construir la seguridad en su proceso de desarrollo inicial. Sin embargo, seguimos viendo cada día nuevos fallos de software y vulnerabilidades de ciberseguridad evitables, lo que subraya la necesidad de que las empresas busquen formas de incorporar el desarrollo de software seguro a su cultura de desarrollo.
El coste de cambiar una línea de código en un equipo de aviónica es de un millón de dólares, y se tarda un año en aplicarlo. Para Southwest Airlines, cuya flota se basa en el 737 de Boeing, les llevaría a la "quiebra" si una cibervulnerabilidad fuera específica de los sistemas a bordo de los 737
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Matias Madou, Ph.D. es experto en seguridad, investigador y CTO y cofundador de Secure Code Warrior. Matias obtuvo su doctorado en Seguridad de Aplicaciones en la Universidad de Gante, centrándose en soluciones de análisis estático. Más tarde se incorporó a Fortify en EE.UU., donde se dio cuenta de que no bastaba con detectar problemas de código sin ayudar a los desarrolladores a escribir código seguro. Esto le inspiró para desarrollar productos que ayuden a los desarrolladores, alivien la carga de la seguridad y superen las expectativas de los clientes. Cuando no está en su escritorio como parte de Team Awesome, le gusta estar en el escenario presentando en conferencias como RSA Conference, BlackHat y DefCon.

Secure Code Warrior está a disposición de su organización para ayudarle a proteger el código a lo largo de todo el ciclo de vida de desarrollo de software y crear una cultura en la que la ciberseguridad sea una prioridad. Tanto si es director de AppSec, desarrollador, CISO o cualquier persona implicada en la seguridad, podemos ayudar a su organización a reducir los riesgos asociados a un código inseguro.
Reservar una demostraciónDescargarRecursos para empezar
Panorama de la gestión de riesgos de los promotores
La gestión de riesgos del desarrollador es un enfoque holístico y proactivo de la seguridad de las aplicaciones, centrado en quienes contribuyen al código y no en los bits y bytes de la propia capa de la aplicación.
Seguridad desde el diseño: Definición de las mejores prácticas, capacitación de los desarrolladores y evaluación comparativa de los resultados de la seguridad preventiva
En este documento de investigación, los cofundadores Secure Code Warrior , Pieter Danhieux y el Dr. Matias Madou, Ph.D., junto con los expertos colaboradores, Chris Inglis, ex Director Nacional Cibernético de EE.UU. (ahora Asesor Estratégico de Paladin Capital Group), y Devin Lynch, Director Senior, Paladin Global Institute, revelarán los hallazgos clave de más de veinte entrevistas en profundidad con líderes de seguridad empresarial, incluyendo CISOs, un VP de Seguridad de Aplicaciones y profesionales de seguridad de software.
Evaluación comparativa de las competencias en materia de seguridad: optimización del diseño seguro en la empresa
Encontrar datos significativos sobre el éxito de las iniciativas Secure-by-Design es notoriamente difícil. Los responsables de la seguridad de la información se enfrentan a menudo al reto de demostrar el rendimiento de la inversión (ROI) y el valor empresarial de las actividades de los programas de seguridad, tanto a nivel de las personas como de la empresa. Por no mencionar que a las empresas les resulta especialmente difícil obtener información sobre cómo se comparan sus organizaciones con los estándares actuales del sector. La Estrategia Nacional de Ciberseguridad del Presidente desafió a las partes interesadas a "adoptar la seguridad y la resiliencia desde el diseño". La clave para que las iniciativas de seguridad por diseño funcionen no es sólo dotar a los desarrolladores de las habilidades necesarias para garantizar un código seguro, sino también garantizar a los reguladores que esas habilidades están en su lugar. En esta presentación, compartimos una miríada de datos cualitativos y cuantitativos, derivados de múltiples fuentes primarias, incluidos puntos de datos internos recogidos de más de 250.000 desarrolladores, opiniones de clientes basadas en datos y estudios públicos. Aprovechando esta agregación de puntos de datos, pretendemos comunicar una visión del estado actual de las iniciativas Secure-by-Design en múltiples verticales. El informe detalla por qué este espacio está actualmente infrautilizado, el impacto significativo que un programa de mejora de las competencias puede tener en la mitigación de los riesgos de ciberseguridad y el potencial para eliminar categorías de vulnerabilidades de un código base.
Servicios profesionales - Acelerar con experiencia
El equipo de servicios de estrategia de programas (PSS) de Secure Code Warriorle ayuda a crear, mejorar y optimizar su programa de codificación segura. Tanto si empieza de cero como si está perfeccionando su enfoque, nuestros expertos le proporcionarán orientación personalizada.
Recursos para empezar
Revelado: Cómo define el sector cibernético la seguridad por diseño
En nuestro último libro blanco, nuestros cofundadores, Pieter Danhieux y el doctor Matias Madou, se sentaron con más de veinte líderes de seguridad empresarial, incluidos CISO, líderes de AppSec y profesionales de la seguridad, para averiguar las piezas clave de este rompecabezas y descubrir la realidad detrás del movimiento Secure by Design. Se trata de una ambición compartida por todos los equipos de seguridad, pero no de un libro de jugadas compartido.
¿Vibe Coding va a convertir tu código en una fiesta de fraternidad?
Vibe Coding es como una fiesta de fraternidad universitaria, y la IA es la pieza central de todos los festejos, el barril. Es muy divertido dar rienda suelta a la creatividad y ver adónde te lleva tu imaginación, pero después de unas cuantas borracheras, beber (o usar IA) con moderación es, sin duda, la solución más segura a largo plazo.